Diccionario de Mancias (B)
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Belomancia: Adivinación por medio de las flechas, los que recurrían a este método, cogían muchas flechas sobre las que escribían frases relativas a sus proyecto, se mezclaban las favorables con las que no lo eran, después se sacaba una y la que salía era mirada como el órgano de la voluntad de los dioses a quienes se preguntaban.
Se llegaba a preguntar y a contestar 1000 veces al día sobre las mas frívolas preguntas de los indiscretos mortales, principalmente antes de las expediciones militares era cuando se hacía más uso de la Belomancia.
Los caldeos tenían mucha fe sobre esta adivinación, los árabes adivinaban por medio de tres flechas que encerraban en un saco, en una escribían "matadme señor", en otra "guardadme" y en la tercera "nada", la primera flecha que sale del saco determina la resolución sobre la cual se deliberaba.
Se llegaba a preguntar y a contestar 1000 veces al día sobre las mas frívolas preguntas de los indiscretos mortales, principalmente antes de las expediciones militares era cuando se hacía más uso de la Belomancia.
Los caldeos tenían mucha fe sobre esta adivinación, los árabes adivinaban por medio de tres flechas que encerraban en un saco, en una escribían "matadme señor", en otra "guardadme" y en la tercera "nada", la primera flecha que sale del saco determina la resolución sobre la cual se deliberaba.
Biastomancia: Arte adivinatorio basado en la utilización de la lechuza y el buho.
Bibliomancia: consiste en permitir que un libro caiga abierto y leer las primeras palabras o la frase que sus ojos enfoquen. Aunque en el pasado se utilizaban libros sagrados, como la Biblia, lo ideal hoy en día es practicar con cualquier libro con el que se sienta una especial afinidad. Es muy corriente la utilización de los clásicos para este propósito.
Bostricomancia: Arte adivinatorio basado en la disposición de los rizos del cabello de un niño movidos por el viento.
Botanomancia: Adivinación por medio de hojas o ramas de verbenas o brezo, sobre la que los antiguos grababan los nombres y preguntas de los consultantes, cuando hacia un fuerte viento por la noche, iban a ver muy de mañana la disposición de las hojas caídas y las adivinas procedían por aquel medio lo que el pueblo deseaba saber.
Brecomancia: Arte adivinatorio basado en la interpretación de la Iluvia al caer.